
Dame un beso para construir un sueño
Y mi imaginación prosperará con ese beso
Cariño, no te pido más que esto
Un beso para construir un sueño
Dame un beso antes de que me dejes
Y mi imaginación alimentará mi corazón hambriento
Déjame una cosa antes de que nos separemos
Un beso para construir un sueño
Cuando esté solo con mis fantasías… estaré contigo
Tejiendo romances… haciéndose creer que son verdaderos
Dame tus labios por un momento
Y mi imaginación hará que ese momento viva
Dame lo que tú puedes dar
Un beso para construir un sueño
Cuando esté solo con mis fantasías… estaré contigo
Tejiendo romances… haciéndose creer que son verdaderos
Dame tus labios por un momento
Y mi imaginación hará que ese momento viva
Dame lo que tú puedes dar
Un beso para construir un sueño

En esta teoría se plantea que para que haya verdadero amor deben existir tres componentes: pasión, intimidad y decisión o compromiso. Cada uno de estos conceptos, en el triángulo del amor, se define de la siguiente manera:
Pasión: deseo sexual o romántico de gran intensidad, acompañado por una fuerte tendencia a buscar la unión física y/o emocional con el otro
Intimidad: conocimiento del otro y confianza en lo que es, lo que hace y lo que siente. Cercanía y preocupación por su bienestar. Necesidad de acercamiento y de revelación mutua.
Decisión o compromiso: voluntad de mantener el vínculo y sentimiento de responsabilidad al respecto. Interés en superar las adversidades y perpetuar el afecto, más allá de las circunstancias temporales.
Con base en ese triángulo del amor, Sterneberg propone la idea de que existen siete formas de amor, según la forma en que aparecen y se manifiestan cada uno de esos tres componentes. Estas modalidades son:
Relación de cariño
Se presenta cuando hay intimidad entre dos personas, pero no pasión, ni compromiso. Esta forma de amor es característica de las relaciones de amistad. Son, por lo general, relaciones muy perdurables aunque no haya un compromiso formal de por medio.
El encaprichamiento
Existe cuando aparece la pasión, pero no la intimidad ni el compromiso. Es característica de los llamados “amores a primera vista” y generalmente, define a las relaciones cortas y triviales. Como el nombre lo indica, la sensación puede tener gran intensidad y persistencia, pero no profundidad.
Amor vacío
Es propio de las relaciones en la que ya no existe pasión, ni intimidad, pero que se mantienen debido al compromiso de ambas partes. Es una forma de vínculo, o una etapa, por la que suelen pasar las parejas que llevan mucho tiempo juntas.
Amor romántico
En el amor romántico hay pasión e intimidad, pero no compromiso. Es un “andar entre nubes”, deleitándose con el otro, pero sin la menor voluntad de darle trascendencia real al vínculo. Este tipo de amor, generalmente, desaparece cuando se presentan adversidades o dificultades.
Amor sociable o de compañía
En este tipo de amor hay intimidad y compromiso, pero no pasión. Ambos disfrutan de la compañía del otro y han tomado la decisión de mantener el vínculo, pese a que no haya deseo sexual o romántico. Es una forma de amor típica de los grandes amigos y de las parejas más maduras.
Amor fatuo
En estas relaciones hay un gran componente de pasión y un fuerte compromiso, pero no intimidad. Generalmente, la decisión de permanecer juntos nace del deseo sexual o romántico, pero no de la confianza o la compatibilidad. Este tipo de relación es característico de personas con grandes inseguridades y dependencias.
Amor consumado
Representa el modelo ideal del amor, en donde están presentes todos los componentes del triángulo del amor: pasión, intimidad y compromiso.
Sternberg indica que este tipo de amor es poco común, pero que lo más difícil no es encontrarlo, sino mantenerlo. Para lograrlo, es necesario recordar que el afecto se debe expresar constantemente y que debe ser alimentado.
Escrito por Edith Sánchez