Paris 1 junio 2019
Y de pronto la vida te detiene, «te sienta» porque quiere hablar contigo y no le has hecho caso. Y te habla, te recuerda cosas que tal vez habías olvidado.
Y te abraza…
Y en ese abrazo te recuerda que sólo has venido a vivir.
No a luchar, no a salvar, no a pagar ninguna deuda.
Sólo a vivir. Leído en Internet. Anónimo