La mañana se muestra y con razón
Pagada de si misma
Qué podría objetarle yo
Que voy por estas calles fáciles
Con mis ropas holgadas
Bajo las cuales dejo curiosear sin traba
A la brisa pueril que viene acompañándome
Yo que hoy todavía voy suelto por los sitios
Dichoso de mirar bajo este sol en tregua
Tanta nimiedad viva tan dichosa
De dejarse mirar
Contento de este ocio desgravado
Donde avanzo ligero de equipaje
Como si no tuviera que arrastrar detrás
Tanto y tan turbio peso del pasado
Qué podría objetarle yo
Pagado de que un día más me toque
Salir así a la calle
Vivo aún por milagro
Y milagrosamente en libertad.
Tomás Segovia
A pesar de que este poema no está escrito para mi día de hoy -ni intentándolo soy capaz de empatizar con él- me gusta. Hasta me da un poco de rabia, que eso tampoco está mal. Un besico
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